Los primeros ajustes en una bici deben hacerse en los 3 puntos de contactos entre el ciclista y la bici, es decir, en el sillín, el manillar y los pedales. Estos ajustes condicionarán la postura final sobre la bicicleta.
Si tienes mal ajustado uno de estos tres elementos, tendrás una posición incorrecta. Y como consecuencia podría no disfrutar de la bici e incluso sufrir lesiones. En este post os vamos a indicar cuáles son los ajustes en un que vosotros mismos podéis hacer. Aunque esto no quiere decir que no recomendamos realizar una biomecánica para que los profesionales adapten tu bicicleta perfectamente a tu cuerpo.
LOS 3 AJUSTES EN UNA BICI
1. ALTURA, INCLINACIÓN Y RETROCESO DEL SILLÍN
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Altura
La altura es uno de los ajustes determinante a la hora de pedalear correctamente y evitar la aparición de lesiones. Un sillín demasiado alto puede provocar una oscilación de la cadera en cada pedalada. Como resultado, una pedalada poco eficaz con un alto riesgo de generarnos una lesión grave. Y, al revés, un sillín excesivamente bajo empeora también el rendimiento, la amplitud del movimiento de la rodilla es muy limitada y puede generar una carga de grupos musculares totalmente evitable.
¿Cómo conseguir la altura del sillín correcta?
- Descálzate y coloca los talones y espalda contra la pared.
- Con la ayuda de un amigo, colocad un libro entre las piernas ejerciendo una ligera presión en el perineo y medid la distancia desde la parte superior del libro hasta el suelo.
- Multiplica esta distancia por 0,85 y ya tienes la altura del sillín teórica desde el eje de pedalier hasta la superficie del mismo.
De todos modos, el resultado de la fórmula es una medida orientativa, esta misma distancia puede estar alterada según la longitud de las bielas, el espesor de la plantilla de las zapatillas, la colocación de las calas y la altura del sillín.
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Inclinación
En cuanto a la inclinación ideal del sillín, lo recomendable es colocar un nivel sobre la superficie del sillín dejándolo lo más plano posible. Y a partir de ahí probar hasta encontrar el punto donde te sientes más cómodo. La inclinación que la punta del sillín presente es cuestión de preferencia personal. Siempre deberá ir o totalmente plano o algo inclinado hacia abajo, dependiendo de gustos y de disciplina que practiquemos.
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Retroceso del sillín
La regulación del retroceso del sillín es otro punto importante que puede condicionar el pedaleo y la salud de las articulaciones. Para llegar a una posición básica de partida debemos conseguir que la proyección vertical de la rótula coincida al máximo con el del eje del pedal. ¿Cómo hacerlo?
- Colócate encima de la bici con las bielas en posición horizontal y las calas enganchadas a los pedales. Para no perder el equilibrio, te aconsejamos apoyarte en una pared.
- Con la ayuda de un amigo y una plomada, verás la línea vertical que parte de tu rótula hacia abajo. Luego regula el sillín hacia delante o hacia atrás hasta que esta línea se proyecte verticalmente hasta el eje del pedal.
2. LOS PEDALES
El punto de apoyo del pie sobre el pedal es algo que tiene importancia a la hora de pedalear de manera eficiente. Evitando muchas de las lesiones más comunes. El ajuste que tendremos que realizar es la colocación de la cala por debajo de nuestra zapatilla. Pero ¿cómo colocar correctamente las calas?
- Descalzo, colócate con los talones contra la pared y sobre un papel en blanco.
- Dibuja el contorno de tu pie y localiza el primer y el último metatarsos. Ahora traza una línea entre ellos. El eje de la cala se posicionará en el medio de ese eje transversal.
- Coloca la zapatilla sobre tu huella y localiza ahora ese eje en la zapatilla. Te puedes servir de una cinta adhesiva.
- Coloca la cala intentando situar su eje en esa línea imaginaria. Transversalmente, podemos partir de una posición centrada. En principio y como concepto básico, no habría que inclinar o girar la cala dado que los pedales de MTB permiten bastante libertad de giro de nuestro talón.
3. MANILLAR
Una vez que hemos situado la altura del sillín, nos interesa ajustar la posición del manillar para conseguir una postura cómoda. La posición del manillar sobre la bici se determinará según el tipo de postura buscada y el tipo de mountain bike que hagas. Contrariamente a los pedales y al sillín, el manillar es un punto de apoyo que te permite obtener muchas variantes. Se ajusta de dos maneras: altura y distancia.
Podríamos ir de una llevar una posición totalmente erguida hasta inclinar el tronco en una posición más radical y menos confortable. Algunos factores que afectan a la posición del manillar son: la longitud del cuadro, longitud e inclinación de la potencia, su altura (rise) y su retraso (sweep) y las «anillas» que coloquemos entre la potencia y la dirección.
Se trata de buscar una posición cómoda en la que el conjunto codos-hombros-cuello estén relajados con una ligera flexión y que las manos lleguen a las manetas fácilmente para frenar y cambiar. Una posición cómoda y relajada nos permitirá también amortiguar el terreno jugando con el cuerpo, habilidad indispensable en una disciplina como el MTB.
Aprovechamos ya para colocar correctamente las manetas de frenos sobre el manillar. Siéntate sobre la bici y estira los brazos y los dedos sobre las manetas de frenos de manera que formen una línea recta. Otro detalle para ayudarte a encontrar una posición en la que encontrarte cómodo.